Loreto Mendiluce Martín
Delegada del CNOO en Navarra
Mucho se habla en los últimos tiempos de la miopía, de su aumento en los últimos años y de la previsión de su escandaloso crecimiento en los próximos 25 años. Pero poco se habla de las implicaciones que trae consigo los defectos visuales, ya sea miopía, hipermetropía y astigmatismo en la población infantil con pocos recursos económicos. Existe la “pobreza visual” ya que la no corrección de estos defectos refractivos va a implicar un futuro menos halagüeño a estos niños. En muchos casos la escasez de recursos económicos, la falta de cultura de sus padres o el desconocimiento hacen que no les compren las gafas que tanto necesitan. La falta de corrección en las aulas va a producir fracaso escolar no porque tengan un problema de aprendizaje sino porque no ven…
Un 30% del fracaso escolar es consecuencia de los defectos refractivos no detectados o corregidos en la infancia. Muchos de los niños a los que tildan de “vagos”, “movidos”, “distraídos” realmente no ven. Este fracaso escolar continuado y las circunstancias económicas y sociales de los padres avocan a estos niños a no poder elegir su futuro, teniéndose que conformar con los trabajos más precarios y sin poder salir de ese gueto en los que el azar de la vida les ha colocado. Es muy importante que el gobierno ayude a estas familias sin recursos ya que el futuro de una sociedad mejor, más justa, pasa por el cuidado de estos niños desde pequeños. Existen ONG maravillosas que aportan su granito de arena, pero no pueden asumir todas las necesidades existentes.
Que los niños puedan elegir su futuro en ocasiones solo depende de unas “gafas”. “Cuidemos sus ojos, cuidemos nuestra sociedad”.
Fuente: Diario de Navarra (Publicado el 31/01/2025)
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